Compatibilidad Signos Zodiacales entre Acuario y Piscis
Consulta la compatiblidad entre Acuario y Piscis ...
Piscis rápidamente querrá depender emocionalmente de Acuario y en ese sentido será muy exigente, pero Acuario tendrá muy poco tiempo para ocuparse de este asunto que él considera superfluo y ajeno a sus intereses.
Con el tiempo Acuario se hartará hasta lo Indecible de la debilidad plsciana porque no podrá compartir con su pareja una entrega que satisfaga a ambos.
Sexualmente Piscis no despertará gran interés en Acuario.
Comenzarán bien pero terminarán mal.
Poseen una compatibilidad casi excelente, ya que podría ser mejor si dejaran de lado algunas actitudes. Incansables emprendedores, no descansan hasta lograr lo que se proponen. Acuario es fantasioso y muy creativo, posee una actitud envidiable y sobresale por su originalidad. Es calmo, estudioso, generoso, prudente, objetivo, realista y planea muy bien las cosas antes de realizarlas. Es frío y conservador, le cuesta demostrar lo que siente y comprometerse intensamente. Por su parte Piscis necesita su tiempo y espacio de soledad, para reflexionar y pensar. Es muy cariñoso, sentimental, centrado y posee un carácter flexible. Es idealista, romántico, susceptible, sentimental, comprensivo y bondadoso. Se entrega sin medidas. Encontrarán finalmente el equilibrio deseado mediante el diálogo continuo, ya que así podrán conocerse y comprenderse profundamente.
Poseen una compatibilidad bastante buena, aunque podría ser mejor si cambiaran algunas conductas. Incesantes trabajadores, no descansan hasta alcanzar lo que se proponen. Acuario es imaginativo y creativo en exceso, posee una actitud inquebrantable y sobresale por su originalidad. Es tranquilo, cordial, objetivo, inteligente, prudente, realista y piensa mucho las cosas antes de realizarlas. Es frío y conservador, le cuesta expresar lo que siente y comprometerse intensamente. Por su parte Piscis necesita sus tiempos de soledad, para reflexionar y pensar. Es muy afectivo, sentimental, centrado y posee un carácter cambiante. Es soñador, romántico, sensible, sentimental, comprensivo y bondadoso. Se entrega sin condiciones. Encontrarán finalmente la armonía anhelada si conversan asiduamente, ya que así podrán conocerse y comprenderse en profundidad.
Existen casos aislados en que los dos signos muestran un verdadero amor. Por lo general, al ser ambas de elementos dispares como el aire y el agua, y estos de por sí no congenian, no se espera que su relación sea como una se la imagina. La insatisfacción suele ser mutua. Es como si les faltase algo. Tanto una como otra, tienden a idealizar a su pareja, y se estructuran los sentimientos en erróneos conceptos que provocan sorpresas desagradables cuando llevan un tiempo conviviendo juntas. El amor entre los seres humanos no es imperativo sexual, ni dogma social o religioso que impida la libre unión entre dos personas, sean estas de distinto color de piel, del sexo que fuere, o de cualquier religión. Pero sí debemos entender que para que surja el amor, es imprescindible el lazo de la amistad, de la amistad sincera que no busca aranceles, ni comisiones de confianza, ni camas huecas de afectos, ni de las dudas de los celos infecciosos.
Existen casos aislados en que los dos signos muestran un verdadero amor. Por lo general, al ser ambos de elementos dispares como el aire y agua, y estos de por sí no congenian, no se espera que su relación sea como uno se la imagina. La insatisfacción suele ser mutua. Es como si les faltase algo. Tanto uno como otro, tienden a idealizar a su pareja, y se estructuran los sentimientos en erróneos conceptos que provocan sorpresas desagradables cuando llevan un tiempo conviviendo juntos. El amor entre los seres humanos no es imperativo sexual, ni dogma social o religioso que impida la libre unión entre dos personas, sean estas de distinto color de piel, del sexo que fuere, o de cualquier religión. Pero sí debemos entender que para que surja el amor, es imprescindible el lazo de la amistad, de la amistad sincera que no busca aranceles, ni comisiones de confianza, ni camas huecas de afectos, ni de las dudas de los celos infecciosos.